Para quienes crecimos desde este lado del mundo, hay algo casi instintivo y visceral en volver sobre los himnos que nos formaron cuando apenas entendíamos lo que decían. Durante años repetimos esas letras a pura intuición, con casetes pirateados, discos gastados y compilados imposibles que viajaban de mano en mano como contrabando o tesoros prohibidos. Cuando una banda latinoamericana decide reconstruir esos clásicos en español, no es solo un gesto técnico, es un acto de memoria, identidad y supervivencia cultural. Es rescatar la banda sonora de nuestra vida, pero esta vez, con nuestra voz, nuestro acento y nuestras cicatrices. Lo que antes era una voz lejana proveniente de territorio europeo hoy vuelve a hablarnos en nuestro idioma.
Retorno del Trueno vuelve con el Vol. 2 de Sonidos de Oi! y Patria. una nueva descarga de calle, orgullo y actitud sin censura. Editado nuevamente por el sello europeo Rebel Records, que apuesta por esta dupla que funciona como pólvora pura. Este segundo volumen, lanzado tres años después del primero, llega más directo, más firme y sin miedo a incomodar, dejando claro que la esencia sigue intacta. Alonso y Willy regresan con la misma rabia que los caracteriza, guitarras ásperas, voz al límite y un pulso militante en lo musical, marcado por el respeto a la tradición de los héroes del RAC y Oi! de siempre, pero con ese sello inconfundible que nace de este lado del mundo.
El disco abre como debe abrir un álbum de calle, con un golpe que no se anuncia. La primera canción entra como un puñetazo seco, directo al pecho, y al estar cantada en nuestro idioma adquiere un peso distinto; las palabras no vienen desde lejos, sino desde la vereda que transitamos. Desde ese arranque, el álbum avanza con una solidez que sorprende incluso dentro de un género que se alimenta del filo, de la urgencia y de la fricción. La mezcla es seca, las guitarras tensas, la batería firme y la voz impecable, hacen de una ejecución como nos tienen acostumbrados estos dos.
Una de las claves que sostienen este segundo volumen es la dupla vocal. Willy mantiene la firmeza clásica, el fraseo limpio, ese timbre curtido por años de música. Alonso, en cambio, irrumpe con una raspada urgente, una garganta que parece trabajada a golpes, y que en canciones como “Morir o vencer” o “Mentiras” cambia el pulso del álbum. La alternancia entre ambos no solo funciona… crea una identidad propia para esta reinterpretación sudamericana.
Las versiones en español no se sienten copiadas ni calcadas. “Varesse” conserva su épica italiana, pero al pasar por el filtro de nuestra lengua se vuelve más narrativa, más callejera, más cercana al oído latino, como si su memoria geográfica se mezclara con la nuestra. “Nuestro orgullo es la lealtad” destaca por su estructura sólida, no busca correr, busca afirmarse. Las guitarras son claras, el tempo firme y el coro queda en la cabeza un buen rato después.
“Decimos la verdad” entra con riff cortante y ritmo sostenido. Es uno de los pasajes más energéticos del disco, con batería precisa y un coro que pide escenario. “Patriotas Alcohólicos” ofrece un quiebre necesario, no baja la intensidad, pero cambia la atmósfera. Tiene humor ácido, olor a bar y un bajo protagonista.
Luego llega “Doc Marten Dental Plan”, que funciona como una inyección de adrenalina. Te arrastra directo a los años más viscerales, a esa adolescencia donde todo era ruido, impulso y amistades forjadas en noches interminables. Es un recuerdo vivo de cuando la música no se analizaba: se respiraba, se vivían a concho cada estrofa. Y entre estas piezas aparece también un clásico británico, Brutal Attack, con “Rock Contra el Comunismo” reinterpretado con pulso sudamericano, transformado aquí en un pequeño himno. Tiene el mismo espíritu de liberación y fuerza que en la primera entrega tuvo “I am Free”. Es inevitable admitir que algunos sonidos quedaron tatuados en el setlist emocional de nuestra vida.
En la recta final, “Nueva Gloria” abre el pecho y cambia sutilmente el aire del disco. A pesar de que se reinterpretan bandas de distintas épocas y estilos dentro de la música que marcó a toda una generación, el álbum nunca se siente disperso, mantiene un hilo conductor claro, firme, como si cada canción fuera parte de un mismo relato una misma historia contada desde diferentes rincones del continente. Ese es el sello inconfundible de Retorno del Trueno, la capacidad de unir mundos sin perder su autenticidad.
Y para cerrar, aparece un clásico de clásicos. “Como el Viento” de Intolleranza despide el disco con ese tono nostálgico que atraviesa épocas, un ritmo firme, atmósfera melancólica y ese aire italiano que sopla como memoria. Es un final preciso, que no baja la intensidad, la canción, al igual que la original, se vuelve un eco largo, persistente, de esos que siguen resonando incluso cuando el disco ya dejó de girar.
El arte del disco en manos chilenas a cargo de SouthDesigner éste no acompaña el disco… lo define. Tinta, contraste, ruina, sombra, botas, una estética sudamericana hecha con identidad propia. El álbum suena calle y también se ve calle.
Este segundo volumen no es nostalgia ni réplica. Es memoria. Es reinterpretación con identidad. Es música que vuelve a nuestro territorio en un nuevo formato, no teme a la crudeza ni a la verdad. Un disco firme, honesto y emocional, que respira calle, oficio y convicción. Y mientras este volumen sigue rodando, la banda deja entrever que una tercera entrega está en sus planes. Por eso la pregunta cae sola, inevitable…¿Qué temas podrían venir en el próximo volumen?
Tracklist del disco:
- Verdadero Skinhead (Steelcapped Strength)
- Varesse (Cívico 88)
- Nuestro Orgullo es la Lealtad (Skrewdriver)
- Mentiras (Batallón de Castigo)
- Decimos la Verdad (Final War)
- Patriotas Alcohólicos (Retaliator)
- Rock Contra el Comunismo (Brutal Attack)
- Morir o Vencer (Estirpe Imperial)
- Doc Marten Dental Plan (Bound For Glory)
- Nueva Gloria (Youth Defense League)
- Como el Viento (Intolleranza)
